La industria de la gestión patrimonial se enfrenta a un desafío
significativo: la proyección de una escasez de aproximadamente 100.000 asesores
financieros para el año 2034, según un informe reciente de la consultora global
McKinsey & Co. Esta situación se debe a una combinación de factores
demográficos, cambios en las preferencias de los clientes y dinámicas del
mercado laboral que están remodelando el panorama de la asesoría financiera.
Crecimiento Estancado y Proyecciones Futuras
Durante la última década, la población de asesores ha crecido a una tasa anual mínima del 0,3%. Sin embargo, las proyecciones indican una disminución anual del 0,2% en los próximos diez años. Esta tendencia sugiere que, sin intervenciones efectivas, la industria podría enfrentar una escasez significativa de profesionales capacitados para 2034. La creciente demanda de servicios financieros, impulsada por una población que envejece y la complejidad financiera moderna, contrasta con la disminución en el número de asesores disponibles.
Factores Contribuyentes a la Escasez
Uno de los principales factores detrás de esta proyección es el envejecimiento de la actual fuerza laboral de asesores financieros. Muchos profesionales se acercan a la edad de jubilación, y la tasa de incorporación de nuevos talentos no es suficiente para reemplazarlos. Además, la profesión enfrenta desafíos para atraer a jóvenes profesionales, quienes pueden percibir otras industrias como más dinámicas o lucrativas. La falta de programas de formación especializados y rutas claras de carrera en el sector financiero también contribuyen a esta brecha.
Impacto de la Gran Transferencia de Riqueza
En paralelo, se anticipa una transferencia de riqueza estimada en 84 billones de dólares de la generación del 'baby boom' a los 'millennials' en los próximos 20 años. Este fenómeno, conocido como la Gran Transferencia de Riqueza (GWT, por sus siglas en inglés), representa tanto una oportunidad como un desafío para los asesores financieros. Según una encuesta de Natixis Investment Managers, el 54% de los asesores españoles considera que la GWT supone una amenaza existencial para su negocio. La preocupación radica en la posibilidad de no retener los activos cuando estos se transfieren a herederos más jóvenes, quienes pueden optar por gestionar sus finanzas de manera diferente o cambiar de asesor. De hecho, el 37% de los asesores españoles expresa inquietud por no retener los activos de los cónyuges o hijos de sus clientes actuales. Para mitigar este riesgo, es esencial que los asesores establezcan relaciones sólidas con las generaciones sucesoras y adapten sus servicios a las necesidades y expectativas de los nuevos beneficiarios.
Estrategias para Abordar la Escasez
Para enfrentar la proyección de escasez de asesores, McKinsey & Co. sugiere dos enfoques principales: aumentar la productividad y atraer nuevo talento al sector. La adopción de tecnologías avanzadas, como la inteligencia artificial y plataformas digitales, puede permitir a los asesores gestionar más clientes de manera eficiente, optimizando procesos y personalizando servicios. Además, es crucial que la industria haga un esfuerzo concertado para atraer a jóvenes profesionales, destacando las oportunidades de carrera, ofreciendo programas de mentoría y formación, y promoviendo una imagen renovada y dinámica de la profesión. La colaboración con instituciones educativas para desarrollar currículos especializados y programas de prácticas puede ser una estrategia efectiva para nutrir la próxima generación de asesores financieros.
Transformación del Modelo de Asesoría
La evolución de las expectativas de los clientes también está impulsando cambios en la industria. Los clientes modernos buscan asesoramiento financiero más personalizado y accesible, similar a modelos de suscripción basados en datos que ofrecen recomendaciones adaptadas a las preferencias individuales. Esta tendencia hacia la hiperpersonalización requiere que los asesores adopten herramientas tecnológicas avanzadas y enfoques centrados en el cliente para satisfacer las demandas cambiantes del mercado. Además, se espera que para 2030, aproximadamente la mitad de los asesores sean mujeres y el 40% pertenezcan a minorías, reflejando una mayor diversidad en la profesión. Este cambio demográfico puede enriquecer la perspectiva de la industria y mejorar la conexión con una base de clientes diversa.
Conclusión
La proyección de una escasez de 100.000 asesores financieros para 2034 plantea desafíos significativos para la industria de la gestión patrimonial. Sin embargo, mediante la adopción de tecnologías innovadoras, la implementación de estrategias proactivas de retención y atracción de talento, y la adaptación a las cambiantes expectativas de los clientes, la industria puede posicionarse para enfrentar este desafío y prosperar en el futuro. Es imperativo que las empresas de asesoría financiera inviertan en formación, tecnología y desarrollo de talento para asegurar una transición exitosa en los próximos años.